
Durante los años ochenta se estudiarán diferentes caminos para una democratización de la comunicación y para alcanzar un análisis de la violencia en los medios.
Romeo y buseta (1986) será un intento de poner en manifiesto contenidos locales, y creencias en las que se tipifican las diferentes violencias intrínsecas de nuestra tradición (roles de la mujer, los niños, el trabajo, etc.).